Hacía unos cuantos años que no pasaba por allí.
Fuimos a las 5 y cierran a las 9, pero a las 8 ya no podíamos con nuestra alma… bueno, al menos yo.
Adrià con ampollas en los pies y con mucho miedo al principio, muchas caídas de todas las maneras imaginables, pero sin daños, jajajja.
Al final estaba hecho un bailarín….. lástima de las ampollas y es que las botas de alquiler es lo que tienen.
El precio fué de unos 12€ por entrar más la compra de unos guantes (2,50€). Es obligatorio llevar guantes y no los alquilan, hay que comprarlos.
Una tarde genial, Adrià era la primera vez que patinaba.
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Además es unos de los pocos sitios donde se puede jugar a curling, tienen montado un equipillo. Ya hace meses que me planteo probarlo, como debe ser eso de jugar a la petanca en el hielo he ir barriendo?
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